sábado, 5 de febrero de 2011
AL RAS DEL TIEMPO
Al llegar la media noche en mi mutismo
…esas doce campanadas se revelan…
y le cantan a las horas que han pasado
(entre el mórbido minuto ante tus ojos)
y la pálida distancia de un recuerdo
Y se arrastra como un lobo maltratado
por un látigo (dos veces afilado)
con la daga de tus labios y tus manos…
de navajas, mutilando aquellos años,
que pasamos de la mano como extraños
en las sendas malversadas de un querer!
Y es que a punto de parir mi última pena,
…pronuncio en soledad tu nombre vago,
allí sobre el altar de mi lamento…
y rompo en mil pedazos tu recuerdo
cortando mi silencio CON TU VOZ!
Y te escucho tan lejano y tan distante,
allí…como el susurro de la noche…
en medio de mi angustia y tu reproche
tratando de acallar la soledad!
Levantas tu mirada de mis ojos…
y miras, quebrantos de tristeza…
sostienes mi alma con tus manos
y cortas de golpe mis suspiros
muriendo de pena y de añoranzas!
Y arrastras los despojos de tus pasos
de huellas de dolor por nuestro llanto…
y marchas (vida mía de mis sueños)
rompiendo tu silencio en mi dolor!
Eileen
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