FUGA MORTAL
Se me escapó de las manos la más férvida caricia de tu cuerpo y se secó en mis campos el huerto de tus sueños claros, que asomaba como cántaros de lluvia en mi ventana en noches de lunas llenas. Y lloró la noche la ausencia inerte y la mudez absorta de tu boca tibia, cuando sin decir palabra te marchaste al infinito y volviste la mirada fría como témpanos de hielo al despedir tristezas
Y mis ojos pardos acariciaron tus pasos lejanos con destino incierto y gritó mi alma en cautiverio, la esencia de tu nombre, que se reventó en los cielos como estrellas muertas con sus letras negras y cayeron a tus pies trocitos de silencios como gotas cristalinas en tormentas fieras y se agitaron todos los vientos que en constante intimidad, rozan quimeras y alborotan en tu hoguera nuestro fuego
Y desandé mis pasos en caminos empolvados con los pies descalzos y maltratados de pisar con fuerza la piedra caliza de tu indiferencia, que a veces me contempla como una fiera al asecho de mi vida
Sin embargo, encontraste mi refugio y me atacaste…y dejaste entre las grutas de mis ojos, la tristeza que desangra tanto llanto y esparciste los pedazos de mi alma en las viejas hondonadas de tus campos
Y hacía dónde he de partir, después de amarte…ay verdugo de mi alma y de mi piel
Eileen
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