viernes, 14 de enero de 2011
CON VOZ DESESPERADA
Me llamaste por nombre y te diste la vuelta
me sentí perdida en tu memoria amarga…
con ese sabor a pecado que me envenena
Tapé con fuerzas mis oídos rotos
…de escuchar mi propio llanto…
y quise huir de tu guarida eterna
Donde los esqueletos me sujetaron sin palabras
y mirándome con sus cavidades huecas
...me avisaron indefensas...
que más allá del alma (les grita tu inconsciencia!)
Eileen
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