
martes, 14 de diciembre de 2010

PERTENENCIA
Tus manos se ocultaron en mi vientre
tímidas, audaces e insinuantes…
y cortaron un pedazo de mi alma
como un pétalo cerezo de la noche
y entonces entre burbujas…
las estrellas cayeron desnudas,
sobre el tacto tenue de una caricia
y me sentiste tuya y fuiste mío hasta el delirio
de ida y de regreso (hasta un suspiro)
donde apenas se susurra a solas…
la vida, el amor y los sentidos!
Eileen
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