
No te marches…
ni me dejes en el huerto
(de mis sueños)
recogiendo en este cesto
tus recuerdos…
mientras nuestra soledad
danza en el viento
Y hasta cuándo…
los manzanos de mis labios
estén listos…
y del campo de mis senos
broten lirios
y de nuevo los recojas
con tus manos…
No te marches…
que mis ojos quieren ver
todos tus mares,
y mi boca ir a beber
tus manantiales
con el alma, el corazón
(y sin pesares)
Ya no escondas
tus sentidos... tu pasión
…ni esa ternura…
que parece ir a temblar
junto a la luna,
en tus noches y al rincón
(de mi locura!)
Eileen
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